El Barça: ¿mensajero de la paz o agente del sionismo?

Por Emrah Kaynak, 20 de agosto de 2013

Le Grand Soir

Imagen: legrandsoir.info
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Como parte de su “Gira de la Paz” el FC Barcelona visitó Israel. El Presidente Sandro Rosell y la delegación catalana fueron recibidos por Shimon Peres y Binyamin Netanyahu, respectivamente Presidente y Primer Ministro de la entidad sionista. Los más ingenuos o los más hipócritas no dejarán de saludar la iniciativa como un gesto a favor de la paz, pero otros se preguntarán por qué el prestigioso club catalán se compromete en tal empresa propagandística.

A pesar de las críticas que levantó la invitación al Camp Nou al soldado israelí Gilad Shalit, el FC Barcelna continúa e incluso estrecha sus afinidades con el Estado judío. El 7 de octubre de 2012, en el partido ya clásico entre el Barça y el Madrid,, el soldado israelí Gilad Shalit fue invitado a sentarse ni más ni menos que en el palco presidencial. Un comando palestino había hecho prisionero a este soldado, después ascendido a sargento mayor, al sur de Gaza, y retenido durante cinco años por la resistencia palestina. ¡Qué socarronería la de presentar esto como una trivial invitación, cuando se trata de un soldado de un ejército que está ocupando ilegalmente desde 1967 otro país y no de un simple ciudadano!

Frente a las críticas por esta invitación, el FC Barcelona invitó a tres futbolistas palestinos: Mahmoud al-Sarsak, encarcelado en aislamiento durante tres años en las cárceles de Israel; y dos representantes de la federación nacional, para asistir a este encuentro de prestigio. Rechazaron la invitación ante este intento de compensación, una patética tentativa de normalizar las relaciones con Israel y de mostrar equidad con ambas partes en conflicto.

La maniobra es sutil e insidiosa: el FC Barcelona afirma que trabaja en favor de la “paz y la armonía” por “establecer relaciones deportivas entre los dos grupos”. Cualquier beneficio que pueda obtener la entidad sionista les puede hacer ganar respetabilidad y diluir así sus responsabilidades como fuerza de ocupación.

La Campaña Palestina a favor del Boicot Académico y Cultural a Israel (PACBI) rechaza expresamente este tipo de iniciativas: “Los proyectos culturales que tratan de establecer relaciones entre los palestinos y los israelíes, la promoción de un equilibrio entre las dos partes, como si su situación fuera similar, o basándose en la falsa suposición de que los colonizadores y los colonizados, los opresores y los oprimidos, son igualmente responsables del conflicto, es intencionalmente engañoso, deshonesto intelectualmente y moralmente reprobable. Este tipo de iniciativas y proyectos que tratan de fomentar el diálogo o la reconciliación entre ambas partes sin tener en cuenta las exigencias de justicia, promueven la normalización de la opresión y la injusticia”.

La misma táctica se ha utilizado durante la reciente visita del club catalán a Tel Aviv. Los jugadores del FC Barcelona visitaron la basílica de la Natividad en Belén, en Cisjordania, y se reunieron con el Presidente palestino Mahmoud Abbas antes de viajar el domingo al Muro de las Lamentaciones y ser recibidos por Binyamin Netanyahu y Shimon Peres. Este último no ha perdido la oportunidad de explotar la imagen del Barcelona (con más de 350 millones de seguidores en todo el mundo) al calificarles de “mensajeros de la paz en Oriente Medio” y alentando con cinismo a “marcar el gol de la victoria en el Camp Nou y el propósito general de la paz”.

Los ingresos de las dos sesiones de entrenamiento están destinados a la construcción de la paz entre los israelíes y los palestinos a través de los valores del deporte, dijo en un comunicado el Barça, insistiendo en la misma retórica pesudo-humanista. Sandro Rosell incluso ha elogiado al Presidente de Israel, diciendo a los periodistas que Shimon Peres es un hombre que “ha hecho mucho por la paz”.

La maniobra fue expuesta con claridad por el propio Rosell: “Ahora está de moda ponerse en el medio: si apreciamos a Isarel también tenemos que mostrar el mismo aprecio por los palestinos. De lo contrario, no haríamos nada por nadie”.

Esta visita a los territorios ocupados se asemeja a una visita a los campos de concentración antes de estrechar la mano del Fuhrer en Berghof. No estoy seguro de que poner en pie de igualdad al verdugo y a la víctima sea la forma más adecuada de promover la paz. El Barça es más que un club. De hecho el club se ha convertido desde entonces, tras sus amistades con Qatar e Israel, en una maquinaria política explotada de forma reiterada por sus dirigentes y donantes.

Emrah Kaynak

Fuente: http://www.legrandsoir.info/le-barca-messager-de-la-paix-ou-agent-du-sionisme.html

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