Dr. Jacques Lacaze
La presidenta de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria ( EFSA en inglés) pertenece al Consejo de Administración de una Asociación que reagrupa a las mayores empresas de la Agroindustria. Así lo confirmó José Bové, diputado europeo ( Europe Ecologie) en una conferencia de prensa, celebrado en Bruselas el pasado miércoles 29 de septiembre.
Los documentos presentados ponen de manifiesto que la Sra. Diana Banati, presidenta de la EFSA, ocultó que pertenecía al Consejo de Administración de ILSI Europa ( Inernational Life Science Institute), asociación que acoge a representantes de diez grandes empresas, como Kraft Foods, Nestlé o Danone.
Esta Agencia tiene la misión de informar a las Comisión Europea en materia de productos alimenticios, sobre todo en lo relacionado con los organismos genéticamente modificados (OGM). La Autoridad de Seguridad Alimentaria nunca ha emitido ninguna opinión negativa sobre los más de 100 productos modificados genéticamente que ha examinado.
El Sr. José Bové pidió la dimisión de la Sra. Banati
Por otra parte, la ILSI es una Organización Internacional que reagrupa a más de 400 empresas, entre las que están Monsanto, Syngenta, Dupont, Nestlé y Kraft Foods. Entre los años 1980 a 1990 intentó aunar los esfuerzos de los fabricantes de tabaco para debilitar las iniciativas de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre el tabaco. En respuesta a varias encuestas, la OMS ya excluyó a ILSI en enero de 2006 de la lista de organizaciones que pueden participar en sus actividades.
El Sr. José Bové pidió la dimisión de la Sra. Banati: La EFSA carece de autonomía, está sometida a los lobbies. Su modo de funcionamiento debe ser revisado de arriba abajo, dice el diputado, que también es vicepresidente de la Comisión de Agricultura del Parlamento Europeo.
La Sra. Banati modificó el pasado 28 de septiembre su declaración de conflictos de interés, tal y como se puede consultar en la página web de EFSA, donde donde de manifiesto, de modo repentino, que pertenece al Consejo de Administración de ILSI.
Dr Jacques LACAZE
01 10 2010
Conflictos de interés
La colusión entre los intereses privados y las instancias de control son ya un tema clásico. En materia de salud es el caso de la sangre contaminada por el virus del sida, cuando se supo que el personaje en cuestión tenía tres chaquetas: director de investigación en productos sanguíneos; consejero del ministro; industrial. Tenía mucho interés en comercializar productos sanguíneos.
Esta política de las tres chaquetas se mantiene. Basta echar un vistazo alrededor para comprobarlo ( En España recordemos el caso de Cristina Garmendia era, hasta entrar en el Gobierno de Zapatero, presidenta de la Asociación Española de Bioempresas (Asebio), el mayor lobby pro alimentos transgénicos y fármacos biotecnológicos que hay en España (en el que están otros lobbies como la Fundación Antama o las mayores multinacionales de transgénicos del mundo: Monsanto o Pioneer), y que también congrega a buena parte de la industria farmacéutica biotecnológica (Bayer, Merck, Bristol-Myers Squibb, Roche, Schering Plough, Esteve -que dirigen Farmaindustria-, o Gilead Sciencies -creadores de Tamiflú/Gripe aviar)
http://www.jacques-lacaze.com/article-n-est-jamais-aussi-bien-servi-que-57964423.html