Nubes radiactivas: ¿cuáles son los riesgos que se esperan en Europa?

[Esta información ha sido publicada por el CRIIRAD, una Comisión Independiente de Investigación e Información sobre radiactividad de Francia (CRIIRAD 471 avenida Victor Hugo 26000 Valence contact@criirad.org), pero creemos que debido a la cercanía también es válida para España y otras regiones de Europa]

Dada la abrumadora cantidad de correos recibidos, y la preocupación que se refleja en la mayoría de ellos, el CRIIRAD ha decidido emitir el siguiente texto informativo a fin de tranquilizar en la medida de lo posible, aunque no podemos dar más información de lo que nos permiten los datos de que disponemos. Es difícil porque los datos utilizados son todavía muy escasos. Resultan más impactantes que los resultados analíticos existentes, pero que no se publican. En un próximo comunicado informaremos sobre las numerosas disfunciones que hacen que después de 10 días mantengamos nuestra indignación e ira.

PROGRESIÓN DE LAS MASAS DE AIRE CONTAMINADO EN DIRECCIÓN A EUROPA

Mecanismos que reducen la radiactividad en el aire

La central nuclear de Fukushima Daiichi ha realizado emisiones a la atmósfera, durante 10 días, formadas por un cóctel de productos radiactivos. En términos generales, tres son los mecanismos que contribuyen a reducir los niveles de contaminación y por lo tanto los niveles de riesgo:

1.- Las emisiones radiactivas se van diluyendo poco a poco en volúmenes de aire cada vez mayores. Obviamente, esto conduce a una disminución en la concentración de material radiactivo en el aire ( o, para ser más precisos, una bajada de la actividad en el aire expresada en Bq/m3). El aire que respiran las personas tiende a ser cada vez menos radiactivo.

Nota: esto es lo que Rober Belbéoch denomina la democratización del riesgo: los niveles de exposición son más bajos, pero un número mayor de personas resultan afectadas).

2.- Los materiales radiactivos presentes en el aire se van depositando poco a poco en el suelo, lo que lleva de forma progresiva a reducir la nube radiactiva y, por tanto, también su peligrosidad. Se produce un depósito seco, de forma continua, sin que influyan las condiciones meteorológicas, y un depósito húmedo, más intenso, propiciado por la lluvia o la nieve. Al caer, limpian las masas de aire contaminado, que precipitan al suelo (o al mar) las partículas radiactivas en suspensión (aerosoles) y los gases solubles ( el caso del yodo radiactivo). Se espera que las nubes radiactivas permanezcan durante mucho tiempo en el Océano Pacífico y el Atlántico, donde las lluvias tendrán un menor impacto desde el punto de vista de la salud.

3,- La actividad de los materiales radiactivos disminuye con el tiempo: algunos de ellos, como el cesio 137 o el kriptón 85, lo hacen muy lentamente, pero otros con mucha rapidez. El ritmo de deterioro está determinado por el período de cada nucleido radiactivo.

Para el yodo 131 es de 8 días. Esto significa que en un período, en este caso 8 días, su actividad inicial se reduce a la mitad, y así sucesivamente a los 16 días…

Nota: La vida media no es suficiente para determinar el tiempo durante el cual una sustancia radiactiva es peligrosa. También debemos considerar su actividad inicial. Si la actividad inicial del yodo fuese de 80 Bq, un mes después, tras cuatro periodos, su actividad estaría dividida por 16, siendo por tanto de sólo 5 Bq, pero si la actividad inicial fuese de 8000 Bq, al cabo de ese tiempo sería todavía de 500 Bq.

El impacto de estos tres mecanismos , depósito, dilución y reducción, obviamente aumenta con el tiempo y la distancia.

 

El paso de las nubes radiactivas sobre América del Norte

Francia se encuentra a unos 15000 km de la costa de Japón siguiendo la trayectoria hacia el Oeste (Océano Pacífico). Utilizando el software de la NOA HYSPLIT norteamericana ((http://ready.arl.noaa.gov/HYSPLIT.php), el CRIIRAD ha realizado un modelo de la trayectoria de los residuos producidos en Fukushima. Este es el camino de los materiales radiactivos liberados el 12 de marzo a las 12 ( las 21 horas en Japón) La simulación se basa en los datos meteorológicos del 12 de marzo a las 12 horas hasta el 21 de marzo a las 6 horas recogidos por la NOAA.

A continuación, hemos buscado un sitio web que nos pudiera proporcionar los resultados de las pruebas que nos permitirían establecer una evaluación provisional de los niveles de contaminación y riesgo. Siguiendo los cambios en las concentraciones a lo largo de la travesía de Estados Unidos, se puede anticipar con mayor precisión el impacto en Francia.

Encontramos algunos resultados, especialmente de la Agencia de Protección Ambiental (ver enlace de abajo). Pero desgraciadamente, estos resultados no se refieren a la actividad volumétrica, sino a la tasa de emisión de la radiación Beta y Gamma de los depósitos recogidos en los filtros de aire. No se aprecian riesgo de inhalación de radionucleidos, o de la intensidad de depósitos en el suelo. La evolución de estos parámetros con el tiempo, sin embargo, muestra un aumento que se debe con toda probabilidad al paso de masas de aire contaminado, teniendo en cuenta su coherencia con las fechas de modelización de las trayectorias.

Fuente de acceso a los datos:

http://www.epa.gov/japan2011/rert/radnet-data.html

Los datos analizados por el CRIIRAD se han obtenido de las siguientes estaciones de medición:

Estado de Alaska:

  • Anchorage
  • Juneau

Estado de Washington:

  • Seatle

Estado de California:

  • San Francisco
  • Anaheim

Estimaciones publicadas por el IRSN (Instituto de Radioprotección y Seguridad Nuclear de Francia)

El IRSN ha anunciado que la actividad en el aire del cesio 137 estaría en torno a 1 mBq/m3. Sobre la cuantificación de las emisiones, el IRSN dijo que: “no tiene datos de medición directa sobre la composición y alcance de las emisiones radiactivas, pero tiene información técnica de las instalaciones accidentadas. La interpretación de esta información ha permitido al IRSN desarrollar los escenarios probables de degradación de los tres reactores desde el 12 de marzo de 2011, garantizando su coherencia con las mediciones de los niveles de radiación obtenida en el lugar”.

El IRSN se ha basado en el supuesto de que los vertidos se mantuviesen hasta el 20 de marzo. Tengan en cuenta que el archivo científico adjunto no se ha publicado. A partir de estos datos proporcionados por el IRSN, Meteo France ha simulado la dispersión de los residuos radiactivos a grandes distancia, hasta el 26 de marzo.

Para ver el modelo de dispersión:

(http://www.irsn.fr/FR/popup/Pages/irsn-meteo-france_19mars.aspx)

Según esta simulación, la nube radiactiva llegaría a Francia en torno al 23 o 24 de marzo. El IRSN dijo que “la concentración que se espera, de acuerdo con este modelo, podría ser el orden de 0.001 Bq/m3, tanto en Francia como en los Departamentos de Ultramar situados en el Hemisferio Norte. Como era de esperar, el Hemisferio Sur no está significativamente afectado por esta dispersión a gran escala.”.

Para ver los comentarios:

http://www.irsn.fr/FR/Actualites_presse/Actualites/Pages/20110319_simulation_dispersion_panache_radioactif.aspx

Estudio preliminar del NIVEL DE RIESGO realizado por el CRIIRAD

Sobre los datos de que dispone, el CRIIRAD considera que:

  • El riesgo de radiación (1) por las masas de aire contaminado será insignificante (La gente que disponga de un medidor de radiación no deberían aumentar el ruido ambiente, pero invitamos a las personas a que lo verifiquen: las mediciones serán mejores de lo esperado).
  • El riesgo asociado con la inhalación de aerosoles y halógenos radiactivos en el aire debe ser muy bajo (véase la nota). Los cálculos de las dosis se detallan a continuación, indicando que la aplicación de contramedidas, incluyendo la toma de comprimidos de yodo estable (3), no están justificadas.

Hemos tratado de estimar las dosis resultantes de la inhalación de los radionucleidos cuya presencia está documentada: el cesio 137, cesio 134, yodo 131, yodo 132, yodo 133 y telurio 132.

El primer cálculo se llevó a cabo para una actividad del cesio 137 de 1 mBq/m3 (estimación proporcionada por el IRSN) y 125 mBq/m3 para el yodo 131 ( basado en la relación isotópica medida por TEPCO en la central de Fukushima Daiichi el 19 de marzo a las 24 horas, hora local). El cálculo se realizó asumiendo que las nubes radiactivas estarán presentes durante una semana y sin que su actividad disminuya.

Conclusión:

Una persona (adulta o niño) que respiren aire contaminado durante 7 días, recibirán una dosis de radiación por debajo de 1 mSv, una dosis insignificante.

Con un margen de seguridad en la evaluación del IRSN (o sea 10 mBq/m3 de cesio 137 en vez de 1 mBq/m3),

  • La riesgos de la radiación por los productos radiactivos depositados en el suelo será insignificante, induciendo algún aumento medible por el ruido ambiental de fondo ( esto puede ser fácilmente verificado por las mediciones radiométricas).
  • El riesgo asociado con la ingestión de alimentos o agua contaminados por la lluvia radiactiva sería limitada.

El laboratorio del CRIIRAD evaluará lo antes posible la radiactividad depositada en el suelo (depósitos secos y depósitos asociados a las precipitaciones) para verificar el orden de magnitud esperado en los alimentos y dar, en caso de ser necesario, el asesoramiento adecuado.

En conclusión, el paso de las masas de aire contaminado en Francia no debe ser causa de demasiada preocupación. Sin embargo, la falta de datos cruciales hace que el CRIIRAD se vea obligado a dar la anterior información de forma condicional. Y podrían ser corregidas con rapidez.

Su laboratorio ha realizado hoy (22 de marzo) varias mediciones de las muestras obtenidas en los filtros de polvo y de carbón activado para asegurarse que el aire que respiramos no está contaminado.

Los primeros resultados, que se refieren a la estación situada en Romans-sur-Isère en la Drôme, confirman que no hay contaminación medible en el aire hasta la fecha de recogida (22 de marzo de 2011 a las 10 horas: no aparece cesio 137 en el filtro de aerosol, ni yodo 131 en el filtro de carbón activado).

Estos controles se intensificarán en los próximos días, lo que confirmaremos oportunamente, corrigiendo la información si fuese necesario, pero de los datos obtenidos hasta ahora, el mensaje es tranquilizador.

Si el tiempo lo permite, también se levará a cabo un análisis del agua de lluvia que nos dará información sobre la magnitud de los depósitos del suelo. En todo caso, habrá mediciones de deposición seca para verificar el nivel de riesgo en la cadena alimentaria.

Recordemos que el tipo de contaminación de los alimentos, la leche, el queso, la carne, se produce con cierto retraso, y cuando el CRIIRAD disponga de los datos y las cifras los hará públicos.

22 de marzo 2011

CRIIRAD

471 Avenue Victor Hugo

26000 Valence

E-mail:

communication@criirad.org

 

[1] Se trata de la exposición humana a la radiación emitida por las sustancias radiactivas presentes en la nubes radiactivas que se desintegran. Algo parecido al estar expuesto a la radiación ultravioleta emitida por el sol. No hay incorporación de productos radiactivos.

[2] Teniendo en cuenta, no obstante, los radionucleidos significativos en el plan de dosimetría, pero que no han sido objeto de medición, estando pendiente en el informe. Se incluyen los isótopos de estroncio y de plutonio.

[3] Por el contrario, el contexto actual puede hacer pensar a cada uno sobre el equilibrio nutricional en su dieta y si no presenta deficiencias en yodo ( la glándula tiroidea necesita yodo para producir las hormonas necesarias para el buen funcionamiento del cuerpo). Recuerde también que cuando el tiroides tiene carencia de yodo, se fija más el yodo radiactivo.