Las Mentiras Radiactivas de Tokyo Electric Power Company

por Richard Wilcox, 1 de junio de 2012

Dissident Voice

Goshi Hosono, ministro de Medio Ambiente y Enegía Nuclear de Japón inspeccionó el edificio del reactor nº4 de la planta de energía nuclear de Fukushima Daichii, en Okuma, prefectura de Fukushima, el pasado 26 de mayo de 2012. La visita de Hosono tenía la finalidad de demostrar la seguridad de la instalación ante la creciente preocupación por el estado del reactor nº4, después de haberse observado un abultamiento en la pared del edificio ( (Toshiaki Shimizu, Japón Pool) La estructura de color amarillo que se observa al fondo es la tapa de contención del reactor.

 La energía nuclear es tremendamente cara y potencialmente muy peligrosa. Uno se pregunta por qué si la energía nuclear es la energía del futuro ha llevado tanto tiempo para que represente el 6% de la energía que se produce en todo el mundo. Incluso este pobre logro representa sólo la energía comercial, excluyendo las necesidades de la energía primaria total mundial de todo tipo. En este caso, la energía nuclear aún representa un tanto por ciento menor, cayendo aproximadamente al 2,5%.

  • Martin Cohen y Andrew McKillop (1)

Negociar con la Industria Nuclear es algo parecido a tratar con los cárteles de la droga sobre la aplicación de la ley y el orden público.

  • Ralph T. Niemeyer, redactor y periodista (2)

En el espacio nadie puede oír sus gritos

-Alien (3)

Y cuando muera, quiero ir al infierno

Y es cuando se me debiera decir adiós y dar la despedida

-Morrissey (4)

¿Podemos confiar en Tokyo Electric Power Company (Tepco) en sus declaraciones sobre el estado de la central nuclear de Fukushima o Tepco es realmente “Tipco”, una compañía que se realiza prácticas peligrosas al afirmar ahora que el edificio de almacenamiento de residuos radiactivos no corre ningún peligro aunque se produzcan nuevos terremotos?

Mientras que los errores son bastante comunes en toda la Historia de la Humanidad, los de las compañías de Energía Nuclear son sustancialmente muy diferentes, ya que tienen el potencial de causar un enorme daño y producir una devastación en la vida de todo el planeta.

No es sorprendente que la Corporación Internacional de Delitos Nucleares y Discípulos de Satán ( INCSS) haya adoptado un sistema de propaganda muy sofisticado a fin de engañar al público sobre las supuestas ventajas de este tipo de energía ( es decir, que solamente se produce el 2,5% de la energía mundial y que es un arma de destrucción masiva) sobre los riesgos de los residuos radiactivos y los accidentes. Como escribe Robert Zimmerman en su libro que disecciona el “culto a lo nuclear” y su “ciencia fraudulenta”:

“ El campo de la protección frente a la radiación está muy comprometido por aquellos que tienen unos intereses privados en la proliferación de armas nucleares y radiológicas y de reactores nucleares para uso comercial. Un sistema internacional de organismos de regulación que sostienen modelos muy anticuados sobre los efectos biológicos de la radiación ionizante, se ha impuesto como la voz autorizada en el campo de la protección frente a la radiación. Los Gobiernos, por su parte, dependen de estas normas y modelos para legitimar la seguridad de sus programas nucleares y ocultar los efectos biológicos perjudiciales que resultan de su uso en una población confiada” (5).

Es importante no particularizar demasiado este asunto en medio de nuestra frustración e indignación con Japón, ya que percibimos un comportamiento incompetente e insensible hacia esta tragedia nuclear. El encubrimiento por parte “de la Organización Mundial de la Salud de la Radiación de Fukushima es una bazofia no científica”, lo cual es otro caso que demuestra que este es un problema de alcance internacional.

Hemos conocido recientemente que en el caso de que otro gran terremoto afectase al Reactor nº 4 y otros estanques de combustible del Reactor nº 1 de Fukushima, tendría el potencial de lanzar radiación 8,5 veces la de Chernobyl, tanto al océano como a la atmósfera. Poniéndonos en lo peor, aunque sólo existiese una probabilidad del 1% ( hay una alta probabilidad de que se produzca otro gran terremoto en la región), es motivo de sobresalto. Una explicación religiosa, espiritual o mundana no bastan para dilucidad en este ensayo conceptualmente original y por el grupo de Convergencia Cósmica.

 Si usted prefiere algo más convencional: durante siglos la Humanidad se ha ido deslizando, poniendo en peligro la moralidad, la integridad y el orden frente a la libertad, seguridad, la comodidad. Un sistema económico basado en una contabilidad fraudulenta (6, 7,8,9,10,11,12,13), y ha creado una infraestructura demasiado compleja y sobrecargada, y en el caso de las centrales nucleares, parece que se encuentran en una situación de colapso.

Sherlock Holmes y el misterio del edificio del reactor inclinado

Poco después del accidente nuclear del 11 de marzo de 2011, un observador hizo notar que “el menosprecio de Japón hacia el desastre producía una gran incertidumbre informativa”.

Es absolutamente necesario que las autoridades japonesas sean transparentes en su comunicación sobre la crisis. Esigualmente necesario, que las autoridades tengan en cuenta el daño que se puede producir por la desinformación o la deformación de la información crítica como consecuencia de la catástrofe” (14).

Pues bien, un año más tarde poco hemos aprendido. Después de que Japón declarase que la crisis nuclear estaba bajo control con la “parada fría” a principios de este año, han dejado de ofrecer datos sobre los parámetros de la central en inglés, que era una de las fuentes más importantes para entender la situación actual en la Central Nuclear de Fukushima (15).

La presión de las bases y de la acción política tienen el objetivo de obligar a Tepco a ser más transparente y para que tome medidas preventivas en la solución del problema del Reactor nº 4 y la piscina de combustible gastado. Los medios alternativos de Internet, como el de Arnie Gunderson, y desde el exdiplomático japonés Murata al senador Wyden, han hecho bastante ruido para obligar a Tepco a que acelere los trabajos. Tepco ha anunciado que ha comenzado a quitar las barras de combustible del Reactor 4, adelantándose a su idea original de comenzar en el 2013 (16, 17).

No es sorprendente que Tepco y el Gobierno japonés se hayan resistido a ayuda externa para resolver este asunto, del mismo modo que Obama dejó a BP asumir el control de los daños después de la catástrofe por el derrame de petróleo en la primavera de 2010 en el Golfo de México. Es un ejemplo claro del pirómano apagando un fuego. Mientras, Israel y Estados Unidos insisten en que se deben realizar inspecciones nucleares interminables en Irán bajo el auspicio de la OIEA. Es ejemplo del doble rasero, el asombro de las normas internacionales.

¿Por qué no coopera más Japón? Después de todo, Japón es una sociedad construida sobre la cooperación y el consenso ( eso sí, algo coercitiva).

1.- No quieren sentar un precedente dejando que equipos independientes de científicos metan las narices en sus operaciones.

2.- Arnie Gunderson hace notar que la razón por la que no existe un esfuerzo internacional para resolver los problemas de Fukushima es que si se conocen los graves defectos de las centrales nucleares de Japón, también se vería expuesta toda la Industria Nuclear de Estados Unidos.

El periodista Yoichi Shimatsu ha afirmado en sus conversaciones con el presentador de radio Jeff Rense que algo huele mal en relación a un posible programa secreto de armas nucleares en Japón (18, 19).

Cohen y McKillop dan razones de que la carrera de armamento nuclear es uno de los motivos más importantes, ya que no podría existir sin éste: es una cobertura de los programas de armamento y de la carrera mundial de armamento nuclear (18, 19).

El reportero de Washington DC, Joseph Trento, ha documentado la evidencia empírica y la prueba circunstancial de la relación entre la energía nuclear y el programa de armamento en Japón. Aquí están las revelaciones que nos aturden:

  • Estados Unidos de forma deliberada ha permitido el acceso a Japón a sus instalaciones secretas de armas nucleares. Transfirió decenas de millones de dólares empleados en la investigación, lo que ha permitido a Japón acumular 70 toneladas de plutonio desde los años 1980.

  • Japón se ha abstenido de desplegar armas nucleares, permaneciendo bajo el paraguas protector del armamento nuclear estadounidense. El país ha utilizado las compañías eléctricas como una tapadera para permitir la acumulación de material para la fabricación de armamento nuclear y así desarrollar un arsenal nuclear más grande que el de China, India y Pakistán juntos.

  • Esta proliferación deliberada del armamento nuclear, a pesar de las declaraciones que hace Estados Unidos de países como Irán, va en contra de los tratados de no proliferación y de las obligaciones legales internas. Rusia, Francia, Gran Bretaña, así como los Estados Unidos, han creado la Industria Nuclear en todo el mundo en base a su complejo armamentístico, utilizando las empresas de propiedad estatal o subvencionadas. Tanto Israel como Japón han sido los principales beneficiados, y han tenido capacidad para desarrollar armamento nuclear desde los años 1960.

  • La Administración Reagan traspasó prácticamente todo el control del material nuclear estadounidense a Japón. El Gobierno japonés sabe del aborrecimiento de su pueblo hacia las armas nucleares, así que tuvieron que desalentar a los medios de comunicación y a los investigadores para que no hurgasen en sus actividades relacionadas con el armamento nuclear”.

  • Las corporaciones internacionales y las autoridades han sacrificado la seguridad de la gente por medio del engaño. Bajo el pretexto de un programa nuclear pacífico, han obtenido grandes ganancias (20).

Tip, tip, Tepco – ¡Ohhh!, una margarita

Está bien documentado y hasta admitido por los soplones de la Industria nuclear japonesa, que esta Industria tiene una larga historia de corrupción y encubrimientos, con zorros que cuidan de las gallinas y pirómanos que apagan el fuego (21). El Profesor Jeff Kingston, de la Universidad de Temple en Tokio, ofrece una cuidadosa cronología de la crisis nuclear de Fukushima desde un punto de vista político (22). La Oficina de Información Nuclear de los Ciudadanos ha documentado los actos ilícitos de la industria Nuclear japonesa con escrupuloso detalle desde 1987 (23), y Kingston expone con su trabajo realizado durante 25 años el fraude de la energía nuclear, declarando que el desastre de Fukushima “fue precedido por una serie de desgracias, encubrimientos, prácticas irresponsables, llamadas y advertencias ignoradas… fue un accidente que se veía venir”. Nos surge la pregunta: ¿ cómo podemos confiar ahora en personas que tienen una credibilidad cero? La respuesta es obvia: no podemos confiar, por lo tanto, Japón se encuentra en una peligrosa situación si otro terremoto sacude la central nuclear de Fukushima.

Kinnston dice que el Primer Ministro de Japón, Naoto Kan, que estaba en el poder en funciones en el momento del desastre de Tohoku, fue obligado a dejar su cargo por su fuerte oposición a la energía nuclear (24). Kan, que fue entrenado como ingeniero, ahora está firmemente convencido de que el uso de la energía nuclear en Japón es peligroso e insostenible, mientras que otras autoridades que ocupan puestos clave abogan por ella (25).

Kingston nos explica lo que es “administrar mal los riesgos”:

Entonces, ¿quién es culpable de las tres fusiones en Fukushima? La Industria Nuclear trató de echar la culpa a Kan, difundiendo la información errónea sobre su visita a Fukushima Daichii, en el sentido de que obligó a TEPCO a detener la ventilación, y posteriormente alegando que ordenó la paralización de la refrigeración de los reactores y las piscinas de combustible gastado con agua de mar… pero la responsabilidad es de TEPCO y no tuvo nada que ver con la visita de Kan del 12 de marzo. Al echar la culpa a Kan se lograron varios objetivos, distraer la atención lejos de TEPCO, y la responsabilidad de NISA y METI en el accidente y la respuesta a la crisis nuclear.

Los terceros que investigaron la crisis nuclear fueron muy críticos con TEPCO y con el Gobierno, indicando la mala preparación para enfrentarse a una crisis, que los trabajadores cometieron errores críticos y que los gerentes estaban inadecuadamente entrenados para enfrentarse a una situación de emergencia. El mal manejo de los procedimientos de emergencia contribuyó a agravar la crisis.

Los investigadores también pusieron en la picota a TEPCO y al Gobierno por el inadecuado manejo de la evacuación de los residentes en las áreas cercanas a la central, evacuándolos a otras zonas donde los niveles de radiación eran más altos que en aquellas de donde venían. El grupo confirmó que los datos generados por el Sistema de Predicción de la Información de Dosis de Emergencia Ambiental (SPEEDI) sobre la dispersión de la radiación estaban disponibles y podrían haberse utilizado para evacuar a los residentes hacia áreas más seguras, pero esta información no fue proporcionada al gabinete del Primer Ministro que gestionaba la crisis hasta el 23 de marzo. Un mes después de la evacuación, el Gobierno uso los datos de SPEEDI para trasladar a los evacuados a otras zonas sin peligro, suponiendo que muchos habían recibido dosis sustanciales de radiación, que podía haber sido perfectamente evitable.

TEPCO y sus reguladores no tuvieron en cuenta las pruebas convincentes sobre el riesgo de un tsunami y la vulnerabilidad de la planta. Las advertencias ya se habían acumulado con anterioridad. No hay ninguna prueba por parte de TEPCO antes del 11 de marzo sobre lo inconcebible de un tsunami. De forma imperdonable, TEPCO no tenía ninguna seguridad sobre esto, y el Gobierno permitió esta cultura de la complacencia, incluso después de comprobar de que TEPCO estaba reduciendo gastos”. (26)

Debido a la presión exterior, Tepco ha tenido que afrontar la situación de una forma más decidida. Los medios corporativos también han empezado a prestar atención a este asunto, como el Wall Street Journal, The New York Times y el Asahi Newspaper y TV News, ofreciendo por fin algo de información decente. Por otra parte, los perritos falderos de las prestitutas siguen haciéndose eco de lo que dice TEPCO: “que todo está bien, y de que pueden confiar en nosotros”. Este artículo aparecido en MSNBC señala que el Sr. Hosono, que recientemente inspeccionó la zona del accidente, es abogado y no un técnico. No se da mucho crédito a los “críticos ambientales” y no se entra en detalle de sus críticas. Los medios omiten y marginan los sucesos que están fuera de los márgenes marcados por el discurso de la elites.

Sin embargo, TEPCO ha sido obligada a desempolvar los documentos que dicen mostrar que el Reactor 4 es seguro y no está en riesgo de derrumbarse. En el blog Ex SKF que trata del desastre nuclear de Fukushima, dice a sus lectores que “no hay ninguna confirmación independiente de los datos”. Existe incertidumbre sobre la información y la carencia de datos de confianza.

Otro ejemplo de la naturaleza arrogante y de disimulo de Tepco se puede observar cuando un reportero del Wall Street Journal presionó a TEPCO sobre la posibilidad de que el Reactor 4 pudiese ser dañado por un nuevo terremoto. El vídeo estaba trascrito el inglés, pero como entiendo y hablo el japonés con bastante fluidez, pude entender cómo evadía la pregunta. La pregunta es directa, honesta, ajustada, pero el tipo de TEPCO inmediatamente cambio de tema preguntándose, en voz baja, y de forma sarcástica: “¿qué tipo de influencia podría causar una perturbación?”. Como si sólo los asteroides pudieran alcanzar la central nuclear. Finalmente, dice que no ha pensado qué ocurriría si se produjese un terremoto de magnitud 10, 11 o 12. Pero la pregunta era sobre un terremoto de magnitud 6, no de magnitud 12. Según la Agencia Meteorológica de Japón, la intensidad del terremoto del día 11 de marzo fue de magnitud superior a 6. Un terremoto de magnitud 7, y es lo que los expertos están diciendo, podría ser suficiente para dañar la piscina de combustible gastado del Reactor 4.

A pesar de la difícil situación, el ejecutivo de TEPCO Akio Momori dijo : “Hemos rechazado las peticiones de expertos de fuera para inspeccionar la planta. Es nuestra responsabilidad directa, es nuestro trabajo el realizar los controles necesarios”. Al mismo tiempo, el representante del Gobierno japonés sobre la crisis nuclear de Fukushima, el Sr. Hosono, recorrió la planta y dio luz verde levantando los pulgares, diciendo que TEPCO estaba haciendo un buen trabajo. El sr. Hosono, Graduado en la Facultad de Derecho de la Universidad de Kyoto en 1995, es Ministro de Medio Ambiente desde fechas muy recientes. No es técnico, ni ingeniero, ni arquitecto, y esto dijo sobre la situación:

Hosono dijo que no fue capaz de ver con sus propios ojos la pared que se dice combada, pero recomendó a Tepco que no “tuviese una visión optimista y que tratase la cuestión con mucho cuidado a fin de mantener la seguridad”. Hosono dijo más tarde a los reporteros que puedo ver como el fondo había sido suficientemente reforzado. “He podido ver el progreso que se ha hecho en retirar el combustible gastado, que es el objetivo principal”, dijo Hosono.

¿Es capaz TEPCO de avanzar lo suficientemente deprisa para terminar antes de verse afectados por un nuevo terremoto? Un trabajador anónimo de la central dijo si otro accidente ocurriese, las medidas de emergencia no se podrían aplicar tal y como dice TEPCO. Por ejemplo, sería muy difícil que acudiesen camiones con rapidez. Otro trabajador con experiencia también dijo pulverizar una forma especial de hormigón en las barras de combustible puede no ser tan fácil como suena (27, 28).

Cuando la Agencia de Seguridad Nuclear e Industrial fue preguntada por un diligente reportero sobre el hundimiento del suelo causado por el terremoto, en la central nuclear de Fukushima, la NISA afirmó haber evaluado la normativa sísmica del Reactor 4 según los “estándares más rigurosos”. Más tarde, en el curso de la entrevista, aseguran que sólo lo hicieron de forma visual (29). Del mismo modo, se han usado modelos computacionales por parte de TEPCO para mostrar que los terremotos por encima de cierta magnitud no dañarían la central, aunque admiten que terremotos de cierta intensidad podrían causar daños tal y como predicen algunos expertos. La actitud descarada de TEPCO es refutada por un informe científico independiente de los Estados Unidos que la falta de soluciones por parte de los reguladores llevan inevitablemente a problemas en los reactores nucleares.

La situación potencialmente catastrófica de Fukushima llevó a un experto, que estuvo durante 20 años como consultor de negocios en Japón para algunas grandes compañías, a solicitar un “enfoque parecido al Proyecto Manhattan”. Advierte que un accidente en el que se vean implicadas barras de combustible nuclear es prácticamente inevitable, aunque prevenible, y el hecho de que no se impidiera se debe únicamente a la incompetencia y estupidez del Gobierno japonés y de TEPCO. Los ciudadanos japoneses resultarán afectados por el modo en que se han hecho las cosas: “No se pueden esperar tres o cuatro años, y mucho menos treinta o cuarenta, para quitar las barras de combustible y limpiar lo provocado por el desastre nuclear. El profesor universitario de Kyoto de ingeniería nuclear, Hajimu Yamana, dice que se trata de una carrera contra reloj” (30).

Arnie Gunderson confesó que no se sorprendería si diez años después TEPCO todavía no hubiese decidido verter hormigón en los reactores y dice una y otra vez que los han enfriado lo suficiente. Los problemas técnicos para quitar el combustible fundido son formidables y si el agua de los reactores se derrama contaminaría las aguas subterráneas. La estructura del suelo en Fukushima es suave y fácilmente penetrable, diferente de la de Chernobyl, donde es más duro y mejor adaptado a los accidentes nucleares catastróficos (30).

Refrencias:

  1. Martin Cohen and Andrew McKillop, The Doomsday Machine: The High Price of Nuclear Energy, The World’s Most Dangerous Fuel (Palgrave, 2012). []
  2. Video. []
  3. Alien (movie poster) (1979). []
  4. Morrissey, “One Day Goodbye Will Be Farewell.” []
  5. A Primer In The Art Of Deception.
    Free PDF Excerpts from the book. []
  6. The Money Masters. []
  7. Ellen Brown, The Web of Debt (Third Millennium Press, 2007). []
  8. Roy Madron and John Jopling, Gaian Democracies (Green Books, 2003. []
  9. Steve Keen, Debunking Economics (Pluto Press, 2001). []
  10. Stuart McBurney, Ecology Into Economics Won’t Go (Green Books, 1998). []
  11. Jerry Mander and Edward Goldsmith, The Case Against The Global Economy And For A Turn Toward The Local (Sierra Club Books, 1996). []
  12. Herman Daly, Beyond Growth (Beacon Press). []
  13. Douglas Reed, The Controversy of Zion (Veritas Publishing, 1985). []
  14. Downplaying Disaster, Informational Uncertainty in the Wake of Japan’s Nuclear Crisis. []
  15. Tepco stopped releasing plant parameters in English. []
  16. TEPCO to Attempt Removing 2 New Fuel Assemblies from Reactor 4 SFP at Fukushima I Nuke Plant. []
  17. Asahi TV: “Unbelievable” — If Unit 4 pool gets a crack from quake and leaks, it would be end for Tokyo. []
  18. Rense Radio Network. [] []
  19. Secret Weapons Program Inside Fukushima Nuclear Plant? [] []
  20. United States Circumvented Laws To Help Japan Accumulate Tons of Plutonium. []
  21. Japan’s Nuclear Cartel Atomic Industry Too Close to Government for Comfort. []
  22. Mismanaging Risk and the Fukushima Nuclear Crisis. []
  23. Nuke Info Tokyo. []
  24. Ousting Kan Naoto: The Politics of Nuclear Crisis and Renewable Energy in Japan. []
  25. Goshi Hosono; Yukio Edano, Minister of Economy, Trade and Industry. []
  26. Ibid. []
  27. Actual Fukushima worker “In case of the major aftershock, all the reactors will be in crisis.” []
  28. Former Fukushima Daiichi Worker: TEPCO screwed up by admitting it’s preparared to spray concrete on spent fuel. []
  29. NISA: “Earthquake may have caused ground subsidence in the area of Fukushima plants.” []
  30. Japan Plant Gets Close Exam. [] []

Richard Wilcox vive en Tokio y contribuye a que los blogs estén mejor documentados sobre la crisis nuclear. http://candobetter.net/node/2428

Fuente del artículo:

http://dissidentvoice.org/2012/06/tokyo-electric-power-companys-radioactive-lies/