Big Pharma: los que convierten la vida en una enfermedad (I)

Por el Dr. Pascal Sacré

Internationalnews

Mondialisation.ca, 10 de mayo de 2010

Cada euro invertido en la puesta a punto de una medicina de marca produce a los monopolios farmacéuticos más o menos mil euros… Hay unas empresas privadas que producen, sea lo que sea, que luego venden. Hay unos órganos civiles, atados a un gobierno, o una estructura supranacional, europea o mundial, que aceptan con o sin modificación el producto propuesto por la empresa privada, fijando el precio y la modalidad de utilización. Y al final está el consumidos, usted o yo, o cualquiera de nosotros. Nosotros somos el blanco de todo este sabio montaje, destinado a amodorrar nuestra inteligencia y nuestro instinto de conservación.

Las instituciones, donde los expertos crean una ilusión de independencia, se someten a las empresas privadas, que convierten a los consumidores en más ciegos, más crédulos, y sin la ayuda de aquellos no podrían convencer a tanta gente, a pesar de la información que sobre estas prácticas groseras y poco escrupulosas se van conociendo. Las instituciones, que están investidas por un halo de independencia e integridad por los medios de comunicación y el inconsciente colectivo, lo que no es cierto, aumentan su poder de persuasión y permiten que la empresa privada penetre en nuestras vidas, en todos los dominios importantes: la salud, alimentación, energía, comunicación, medios, armamento, finanzas. Su verdadero objetivo son el monopolio, la opacidad, la penetración en las instituciones públicas a nivel estratégico, la manipulación de la lengua. Quieren por encima de todo vender, con el menor coste para ellos, y les resulta indiferente si es defectuoso, peligroso, o simplemente inútil. No importa si el producto es beneficioso, o si es tóxico, lo cual ocurre muy a menudo.

Estas empresas someten a la población a ensayos como si se trataran de conejillos de indias, tanto en los países en vías de desarrollo como en los desarrollados, con lo que se puede comprender el concepto que tienen de la vida humana.

Si su infiltración en las instituciones públicas es necesario para la buena marcha de sus asuntos, la manipulación de la lengua es su arma más poderosa, lo que les permite apoderarse del pensamiento de las personas. Es la etapa clave. De esto trata el capítulo 1 del libro de Normand Baillargeon, “Pequeño curso de autodefensa intelectual: la lengua.”

A fuerza de repetirlo y con ayuda de un buen conocimiento de la psicología de las personas afectadas, se puede probar que un cuadrado es en realidad un círculo. ¿Qué son en definitiva un círculo y un cuadrado? Simples palabras, y a las palabras se las puede dar el significado que se quiera de forma que se las haga irreconocibles”. Son palabras de Joseph Goebbels, Ministro nazi de Información y Propaganda (1).

En el caso dado a conocer por Sheldon Rampton y John Tauber, se muestra como hay grupos interesados en la utilización de determinados significados para influir en la población. En 1992, la International Food Information Council (IFIC) de los Estados Unidos se mostraba inquieta por la percepción que el público tenía sobre las biotecnologías alimentarias ( organismos genéticamente modificados, nanotecnología). Se inicia un vasto programa para imponer la forma en la que hay que hablar de estas tecnologías al público. Las recomendaciones en su gran mayoría hacen referencia al vocabulario que hay que emplear.

Son palabras que den una imagen positiva: belleza, abundancia, niños, elección, diversidad, orgánico, herencia, granjero, flores, generaciones futuras, trabajar mucho, mejorar, pureza, suelo, tradición. Sin embargo, otras se deben desechar por completo: biotecnología, ADN, economía, experimentación, industria, laboratorio, máquina, manipular, dinero, plaguicidas, provecho, radiación, seguridad e investigador (2).

El capítulo 1 del libro citado revela en 65 páginas los mecanismos de manipulación mediante subterfugios lingüísticos, de forma que quedamos fuertemente condicionados para reflexionar, comparar, analizar, hablar, o creer y aceptar, o negar, siguiendo los objetivos de las empresas privadas. El lenguaje controla nuestros cerebros en una fase preconsciente, mucho antes de que se produzca una reflexión o análisis…. Por tanto, la manipulación de las palabras, de la lengua, de las imágenes en la televisión y los medios en general, juega un papel muy importante.

Según Albert Bandura, doctor en psicología, profesor de la Universidad de Stanford, la televisión y los medios de comunicación (cine, periódicos…) son la forma más poderosa de influencia y de condicionamiento, conformando una determinada mentalidad y comportamiento de las personas, siendo más importante que la de los padres, los profesores o los compañeros.

Las películas, la televisión, los documentales, los periódicos, los juegos, la publicidad, ejercen un papel persuasivo muy importante sobre nuestro aprendizaje, comportamiento y percepciones individuales y sociales.

Las mayores empresas energéticas, las más contaminantes, tratan de presentar la máscara de la respetabilidad; las empresas farmacéuticas se unen en alianzas como GAVI ALIANZA, fundaciones como la de Bill y Melinda Gates, organizaciones como la OMS o la ONU (3). Son sólo operaciones de marketing destinadas a dar forma a las ideas de personas mal informadas, presentándose como organizaciones filantrópicas, escondiendo la explotación como ayuda, lo que les permite utilizar a la población como conejillos de indias.

Notas:

(1) Pequeño Curso de Autodefensa Intelectual, Normand Baillargeon, Lux Editeur, 2006, p. 19.

(2) S. Rampton y J. Stauber, Trust Us, We’ re Experto, chap.3.

(3) Las tasas de vacunación alcanzan un nivel sin precedentes en los países pobres http://www.gavialliance.org / media_centre / press_releases / 2007_01_26_fr_pr_davos.php

http://www.internationalnews.fr/article-big-pharma-ceux-qui-font-de-nos-vies-une-maladie-par-dr-pascal-sacre-50231949.html

Traducido del francés por Zenón