Por Catalina J. Frompovich, 20 de mayo de 2014
Primero fue Japón en tomar en consideración los efectos adversos que experimentaban las jóvenes al recibir las vacunas contra el VPH, la tan publicitada “prevención contra el cáncer cervical”. Ya el pasado 24 de febrero de 2014, esta periodista publicó un artículo sobre un Simposio Internacional sobre los efectos de las vacunas contra el VPH que se iba a celebrar en Japón los días 25 y 26 de febrero de 2014.
Posteriormente publiqué otras noticias relacionadas: Los daños por las vacunas contra el VPH pone en guardia al Gobierno japonés. O el comunicado de prensa emitido por Sanevax respecto a las medidas tomadas por Japón respecto a las vacunas contra el VPH. [ O la carta dirigida por la Asociación Médica MedOcean al Presidente de la República)
Una de las medidas más importantes adoptadas por el Gobierno japonés como resultado de aquel Simposio, según el diario Los Angeles CityWatch, es que
“Las instituciones médicas japonesas están obligadas por ley a informar a las niñas y sus padres que el Gobierno no recomienda la administración de la vacuna, debido a los efectos adversos asociados” (1) [¿No deberían el resto de Gobierno tomar una medida semejante?]
Como resultado de los trabajos científicos presentados durante la celebración del Simposio, los investigadores médicos franceses piensan que hay suficiente información científica como para tomar medidas frente a los problemas que presentan las chicas francesas que reciben la vacuna contra el VPH. Como dice Norma Erikson, Presidenta de SaneVax: “El Gobierno francés no sólo está escuchando a las víctimas de la vacuna, sino que está llevando a cabo debates científicos abiertos. Este tipo de debates abiertos debieran ser cosa corriente en cualquier parte del mundo”. Algo que he venido defendiendo en relación con los efectos adversos por la administración de ciertas vacunas, ya desde mediados y finales de 1980.
El último comunicado de prensa de Sanevax dice:
“París, Francia: El uso de adyuvantes de aluminio en las vacunas contra el VPH ofrece un perfil de riesgo, y será objeto de escrutinio científico y debate abierto, desde el 22 de mayo. Las partes interesadas tendrán la oportunidad de presentar sus alegaciones ante el Parlamento francés, las autoridades sanitarias, profesionales médicos, gracias a los esfuerzos de la organización no gubernamental E3M, que integra a los pacientes con MMF (miofascitis macrofágica) y OSTA, una Oficina Parlamentaria de Evaluación de la Ciencia y Elecciones Tecnológicas [Aparentemente fuera del control de la Agencia FDA de Estados Unidos].
(…)
Las autoridades del Gobierno francés están dispuestas a escuchar a las víctimas de los efectos adversos de la vacunación (…) No sólo el Gobierno francés está dispuesto a escuchar a las perjudicadas, sino a los científicos, facilitando el debate abierto, con la colaboración de la prensa”. [Algo poco probable que ocurra en Estados Unidos [y en España], donde las empresas farmacéuticas son las que dictan la ciencia de la vacunología].
En la primera sesión del debate se hablará sobre “Aluminio: un adyuvante bajo vigilancia”, que incluirá presentaciones de investigadores internacionales. La segunda mesa redonda trata sobre “La vacunación contra el VPH, se debe administrar con precaución”, en la que participará el Dr. Sin Hang Lee, MD, y Lucija Tomljenovic, dos de los investigadores más destacados en la investigación del aluminio presente en las vacunas contra el VPH, además de incluir el testimonio de la madre de una niña que presenta MMF después de haber sido vacunada contra el VPH. Habrás más debates, puede consultar la agenda aquí.
En las siguientes sesiones, las de la tarde, la primera mesa ronda trata sobre Seguridad y eficacia del uso de adyuvantes de aluminio, que se presenta como muy interesante después de que las empresas farmacéuticas hayan repetido hasta la saciedad que su uso ha sido aprobado y ha pasado la revisión por pares.
En la segunda mesa redonda de la tarde, otra interesante discusión titulada ¿Hay adyuvantes alternativos para las vacunas?. En opinión de esta periodista, este es uno de los asuntos más relevantes, ya que se están usando numerosos adyuvantes, incluyendo el escualeno, que probablemente sea tan perjudicial como el aluminio.
La razón por la que se usan adyuvantes en las vacunas es por lo que se conoce como respuesta a los antígenos, lo que se considera inmunidad. Pero eso es algo que está lejos de ser un hecho biológico comprobado, a raíz de los acontecimientos más recientes, como es el caso de las tasas de enfermedades infecciosas transmisibles. En Estados Unidos, el 90% de los que contraen enfermedades infecciosas transmisibles están completamente vacunados. Por lo tanto, los adyuvantes no proporcionan un 100% de inmunidad.
Las Mesas Redondas estarán abiertas al público y la prensa, lo cual supone un soplo de aire fresco, ya que en Estados Unidos todas las puertas están cerradas en el tema de las vacunas.
Espero poder ofrecer a los lectores información sobre este debate abierto que se organiza en Francia sobre las vacunas contra el VPH
Notas:
[1] http://www.citywatchla.com/8br-hidden/6239-new-hpv-vaccine-study-surprises-even-doctors
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Catalina J. Frompovich es nutricionista, con varios títulos en Nutrición y Ciencias de la Salud. Posee el certificado de Teoría y práctica Ortomolecular. Sus trabajos son publicados en revistas nacionales y de las aerolíneas, desde principios de 1980. Ha escrito varios libros sobre temas de salud, y monografías junto a médicos, enfermeras y profesionales de la salud. El último libro de Catalina se publicó en octubre de 2013: Vaccination Voodoo, What YOU Don’t Know About Vaccines. Su sitio web
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Procedencia: http://www.activistpost.com/2014/05/france-is-second-country-to-declare.html#more