Revisión de las directrices internacionales de exposición a la radiación por microondas, desde 1957 a 1968

MagdaHavas.com

 

13 de abril de 2011. Swanson y sus colegas de la Oficina Internacional de Trabajo (Ginebra, Suiza) y la Oficina de Seguridad y Salud Ocupaciones, de los Servicios de Salud Pública (Cincinnati, Ohio), han revisado las directrices sobre radiación microondas y han publicado su estudio en la American Industrial Hygiene Association Journal, vol. 31: 623-629 (1970). Haga clic en el enlace para descargarse en un archivo pdf la revisión: http://www.magdahavas.com/wordpress/wp-content/uploads/2011/04/AMERICAN-INDUSTRIAL-HYGIENE-ASSOCIATION-JOURNAL-A-Review-of-International-Microwave-Exposure-Gu.pdf

A continuación hago un corto resumen de la información que aparece en el trabajo de Swanson y sus colegas. Añado algunos comentarios que aparecen entre corchetes. Para convertir las unidades que aparecen en mW/cm2 a microW/cm2 se multiplica por 1000.

Estados Unidos

1.- De 1940 a 1970 el uso de equipos que emitían radiación por microondas se incrementaron de forma considerable.

2.- En los Estados Unidos, las radiofrecuencias (RF) situadas entre los 10 a 10.000 MHz se clasificaron como radiación de microondas, mientras que en Europa estos márgenes se situaban entre los 300 a 300.000 MHz. [NOTA: Ahora se utiliza la gama europea para delimitar la radiación de microondas dentro del espectro de radio frecuencias].

3.- En 1970, los científicos reconocieron que ciertas partes del cuerpo son incapaces de disipar el calor, siendo las más vulnerables a la radiación de microondas. Entre ellas se incluye el cristalino del ojo (formación de cataratas) y los órganos reproductivos (esterilidad o cambios degenerativos).

4.- La profundidad de penetración de la radiación en el tejido está en relación con la frecuencia, de modo que hay una mayor penetración a frecuencias más bajas.

5.- En Estados Unidos, las primeras directrices se establecieron durante la Conferencia Tri-Service, que tuvo lugar en 1957. A continuación se muestran algunas de estas directrices:

Los participantes en la Conferencia eran de la opinión de que no había suficientes datos para determinar los niveles seguros de exposición para cada frecuencia o rangos de frecuencia, dentro del espectro de las microondas, por lo tanto se seleccionó un valor de 10 mW/cm2 [10.000 microW/cm2] para todas las frecuencias. La Fuerza Aérea de los Estados Unidos estableció este nivel de exposición en mayo de 1958, aplicándose al rango de frecuencias situado entre los 300 a 30.000 MHz, estableciéndose como un límite máximo de exposición admisible, que no podía ser superado. El único factor considerado para establecer este criterio fue el de nivel de densidad de potencia. Factores tales como el tiempo de exposición, la temperatura ambiental, que podría tener un efecto de aumento o disminución en la respuesta térmica del cuerpo, la sensibilidad de diferentes partes del cuerpo, o el efecto de las corrientes de aire que enfrían el cuerpo, no se tuvieron en cuenta a pesar de que todos ellos eran reconocidos como factores que podían afectar la respuesta biológica.

[NOTA: Está claro que hasta 1970 las directrices en Estados Unidos eran un tanto arbitrarias, que se basaban en efectos térmicos solamente y no se incluían los efectos biológicos y sobre la salud. Los niveles se han reducido de 10 a 1 mW/cm2 pero sigue siendo un valor de 100 a 1000 veces mayor que las directrices de otros países].

Reino Unido, Alemania Occidental, Francia y los Países Bajos

6.- Las directrices en el Reino Unido y en Alemania Occidental expusieron a los ciudadanos a niveles de 10 mW/cm2 (igual que en Estados Unidos).

7.- En Francia, sólo al personal militar se le permitió estar expuesto a niveles de 10 mW/cm2 durante las horas de trabajo. En las zonas de descanso y zonas públicas las directrices establecieron un nivel de 1 mW/cm2.

8.- En los Países Bajos, se establecieron directrices con unos niveles de 1 mW/cm2.

Polonia, URSS y Checoslovaquia

9.- Las directrices en el bloque de los países del Este de Europa eran mucho más protectoras que las de los países Occidentales.

Polonia

10.- Las directrices en Polonia, establecidas entre 1961 y 1963, fueron siguientes:

  • 10 microW/cm2 [0.01 mW/cm2], sin límite de tiempo o de estancia en esta zona.

  • 10 y 100 microW/cm2 [0.01 and 0.1 mW/cm2], con un tiempo de trabajo o de estancia que no podía exceder de 2 horas de cada 24.

  • 100 y 1000 microW/cm2 [0.1 and 1 mW/cm2], con un tiempo de trabajo o de estancia en el aire que no podía sobrepasar los 20 minutos cada 24 horas.

11.- La regulación polaca exigía un examen médico anual para los trabajadores expuestos, incluyendo exámenes neurológicos y oftalmológicos; una colocación segura de las instalaciones que generaban microondas, con pantallas de protección, protección del personal, vigilancia del lugar y educación en seguridad.

12.- La regulación polaca prohibía el trabajo de los jóvenes en zonas irradiadas por microondas, de las mujeres embarazadas y de personas que sufrían de ciertas enfermedades, que se enumeraban en el Reglamento.

URSS

13.- Las normas en la URSS recogían los siguientes niveles en cuanto a la exposición:

  • 10 microW/cm2 [0.01 mW/cm2] en una jornada de trabajo

  • 100 microW/cm2 [0.1 mW/cm2], durante un máximo de 2 horas diarias

  • 1000 microW/cm2 [1 mW/cm2], durante un máximo de 15 minutos al día [ a unos niveles de 1000 microW/cm2 sólo podían estar expuestos los soviéticos durante un máximo de 15 minutos al día, los polacos un máximo de 20 minutos, ¡ los norteamericanos podían estar expuestos las 24 horas del día!]

14.- La URSS también fue la primera en proponer unas normas por exposición a la radiación electromagnética de frecuencia intermedia ( electricidad sucia), que hasta entonces se había considerado que no tenía efectos sobre el cuerpo humano. Estos niveles eran:

  • Onda media (100 kHz – 3 MHz) – 20 voltios / metro [29 mW / cm 2]

  • Onda corta (3 MHz-30 MHz) – 5 voltios por metro [1,8 mW / cm 2]

  • onda ultra corta (30 MHz-300 MHz) – 5 voltios por metro [1,8 mW / cm 2]

[NOTA: La OMS ha reconocido recientemente la importancia de las frecuencias intermedias (FI), pero la información que proporciona es muy limitada].

15.- Los exámenes médicos también estaban regulados en la URSS para las personas expuestas a radiación electromagnética. Las contraindicaciones médicas se aplicaban para que los trabajadores no estuvieran expuestos a radiación de microondas si tenían ciertas enfermedades. Se hacía especial hincapié en las enfermedades sanguíneas, trastornos neurológicos y enfermedades crónicas de los ojos.

16.- Las medidas preventivas de carácter técnico son utilizadas en los servicios de salud de la Unión Soviética y en los centros epidemiológicos para asegurar el cumplimiento con las regulaciones de salud: se disminuyó la cantidad de energía irradiada; medidas de absorción y reflexión; protección del personal que operaba equipos que emitían microondas.

Checosolovaquia, 1965, por encima de 300 MHz:

17.- Los siguientes valores se establecieron para la población en general y trabajadores no empleados en la generación de energía electromagnética como dosis tolerables de radiación y que no se debían ser excedidos por una persona durante un día natural:

  • para la generación continua en el valor de las frecuencias de microondas = 60 donde la energía es expresada en microvatios por centímetro cuadrado y el tiempo en horas [(microW/cm2) x t (horas)< 60, por lo tanto un tiempo de exposición durante 24 horas se corresponde a un flujo promedio de energía de 2,5 mW/cm2]

  • para la generación de impulsos en el valor de las frecuencias de microondas = 24 donde la energía es expresada en microvatios por centímetro cuadrado y el tiempo en horas [(microW/cm2) x t(hours)< 24, por lo tanto durante 24 horas la exposición corresponde a un flujo medio de energía pulsada de 1 mW/cm2].

18.- El último punto que es digno de mención es la recomendación de los autores de que “al aplicar el concepto de exposición ponderada en el tiempo, el especialista en salud debe tener en cuenta hasta qué punto se puede extrapolar la relación entre dosis y tiempo”.

La extrapolación de la relación dosis-tiempo

Tanto los teléfonos móviles como los routers WiFi utilizan radiación de microondas pulsátil y es bien conocido que esta radiación de microondas es más dañina que la radiación continua. Si aplicamos el concepto de exposición ponderada en el tiempo de la República Checa, obtenemos lo siguiente (ver las últimas cuatro filas de la tabla 1). Estos valores comienzan a acercarse a las directrices recomendadas para Salzburgo el aire libre (0,1 mW) e interiores (0,01 mW/cm2) de exposición.

Tabla 1. Comparación de las pautas de exposición ponderada en el tiempo en los países seleccionados.

Es evidente que las directrices que se diferencian en 4 órdenes de magnitud ( (de 10.000 a 1 mW / cm 2) deben ser reconsideradas.

 

http://www.magdahavas.com/pick-of-the-week-25-review-of-international-microwave-exposure-guidelines-from-1957-to-1968/