por Gilad Atzmon / 31 de mayo 2010
En el momento de escribir este artículo, la magnitud de la masacre israelí en el mar aún no está del todo aclarada. Sin embargo, ya sabemos que a las 4 de mañana un comando de la FDI atacó al Free Gaza, barco con ayuda humanitaria. Sabemos por la prensa árabe que al menos 16 activistas han sido asesinados y otros 50 han resultado heridos. Es obvio que Israel está tratando de ocultar la verdadera naturaleza de este suceso: un asesinato colectivo inhumano alimentado por una psicosis e impulsos paranoicos.
Vídeo del ataque israelí al Free Gaza:
http://www.livestream.com/insaniyardim
Durante varios días el gobierno israelí preparó a la sociedad para esta masacre en el mar. Dijeron que la flotilla llevaba armas y que había terroristas a bordo. Sólo ayer por la noche se me ocurrió que esta mentira israelí era una forma de preparar a la opinión pública para una operación militar mortífera en aguas internacionales. No se equivoquen. Si yo no sabia dónde se dirigía Israel y las consecuencias, el gabinete israelí y la elite militar eran plenamente conscientes del camino que iban a recorrer. Lo que ocurrió esta noche no fue sólo un ataque terrorista pirata. En realidad fue el asesinato a plena luz del día a pesar de que era de noche.
Ayer a las 10 de la noche me puse en contacto con el Free Gaza y les dije todo lo que sabía. Obviamente que los activistas por la paz tenían muy pocas posibilidades para hacer frente a la máquina de matar israelí. Estuve rezando toda la noche por ellos. A las 5 de la mañana se conoció la noticia en todo el mundo: en aguas internaciones, Israel atacó un convoy con inocentes que trataban de llevar cemento, papel y asistencia médica a los habitantes sitiados de Gaza. Los israelíes usaron munición real y dispararon contra todo lo que se movía a su alrededor.
Hoy veremos demostraciones en todo el mundo, muchos eventos de luto por nuestros muertos. Incluso podremos ver a algunos de los amigos de la postura que toma Israel en contra de esta masacre. Pero esto no es suficiente.
La masacre fue una operación israelí premeditada. Israel quería sangre, ya que considera que su poder de disuasión está función de los muertos que deja atrás. La decisión de Israel de un comando con cientos de soldados contra población civil fue tomada por el gabinete israelí junto con los comandante israelíes del escalafón superior. Lo que hemos visto no ha sido sólo un fracaso sobre el terreno. Es un fracaso institucional de una sociedad morbosa que ya hace mucho tiempo que perdió el contacto con la humanidad.
No es ningún secreto que los palestinos están viviendo en un estado de sitio desde hace varios años. Pero ahora es el momento de seguir adelante y ejercer una presión sobre Israel y sus ciudadanos. Desde la masacre de ayer cometida por el ejército que siguió las instrucciones dadas por un “gobierno elegido democráticamente”, todos los israelíes deben considerarse como parte de una guerra criminal, sospechosos mientras se muestren indiferentes antes casos como éste.
Teniendo en cuenta que Israel ha tomado al asalto un buque con banderas de Irlanda, Turquía y Griega, los miembros de la OTAN y los países de la UE deben suspender de inmediato las relaciones con Israel y cercar el espacio aéreo a los aviones israelíes.
Considerando las noticias de ayer sobre submarinos nucleares israelíes apostados en el Golfo, el mundo debe reaccionar de forma rápida y severa. El Estado judío no mata sólo por descuido, como dicen en las campañas de prensa en Israel, sino que buscan infligir dolor y devastación en los demás.
http://dissidentvoice.org/2010/05/israeli-butchery-at-sea/#more-17741